Hoy os propongo esta sopa de verduras campesina italiana. Es un primer plato muy completo ya que lleva en su composición verduras, pasta o arroz y legumbres. La receta auténtica lleva en su composición una manita de cerdo para que espese la salsa pero yo no se la he puesto. Podemos variar las verduras y hortalizas poniendo las que estén de temporada o las que en ese momento tengamos a mano.
Es un plato ideal y vistoso para el otoño e invierno en que apetecen platos de cuchara hechos a fuego lento, como los hacían nuestras abuelas para combatir el frío y reconfortarnos.
75 gr de alubias blancas cocidas
75 gr de pasta corta de colores
2 lonchas de panceta
1 cebolla grande
1 puerro
2 zanahorias
1 rama de apio
3 tomates medianos
1 diente de ajo
1 litro de caldo de cocer las alubias o agua
queso parmesano rallado (opcional)
aceite
sal y pimienta
albahaca y orégano
Preparación:
Poner a remojo las alubias la noche anterior o al menos 12 horas.
Cortar la panceta en tiritas finas. Pelar y picar la cebolla y el puerro en dados. Quitar las hebras del apio y cortar en rodajas. Pelar los tomates y cortar en dados. Raspar las zanahorias y cortar en bastones o en cuadrados.
Cocer las alubias con agua y una hoja de laurel hasta que estén tiernas pero no pasadas. En la olla rápida tardarán 15-17 minutos. Escurrir y reservar.
En una cazuela poner 2 cucharadas de aceite de oliva y freir la panceta para que suelte la grasa.
En la misma cazuela poner la cebolla, el puerro y el ajo y sofreir hasta que estén transparentes, unos 5 minutos. Añadir la zanahoria y el apio removiendo para que se integren con los demás ingredientes y se ablanden un poco. Después añadir un poquito de pimentón, los tomates las alubias y el caldo de cocer las alubias. Salpimentar y cocer durante 25-30 minutos.
Pasado este tiempo añadir la pasta y un poquito de albahaca y orégano. Continuar la cocción durante 10-12 minutos más. Si es necesario añadir más agua o caldo para que quede más o menos caldosa según nuestro gusto.
Servir caliente y con un poquito de queso parmesano rallado, servido aparte para que cada comensal se sirva a su gusto.