Cuando el frio del invierno todavía nos hiela la cara al salir a la calle o asomarnos a la ventana..... ¡qué bien sienta este tipo de platos!. Recien salido del horno, tan calentito, humeante y el olor que dejan en la cocina y que inunda toda la casa.
Aunque pueda parecer algo elaborado no lo es en absoluto ya que no requiere mucha preparación. Lo más aburrido diria yo es preparar las verduras pero lo podemos solucionar, en menos que canta un gallo, si en vez de espinacas frescas utilizamos las espinacas baby que vienen envasadas en bolsa, listas para consumir.
Plato vegetariano donde los haya (si suprimimos el bacon) aunque no de dieta. Rico, rico.......... Si no os gustan las espinacas las podeis sustituir por acelgas o cualquier otra verdura que os guste.
Manos a la obra que en un pis pas tenemos un primer plato rico, sabrosón y saludable.
Ingredientes (4 personas):
200 gr de champiñones cortados en láminas
1 diente de ajo
1 cucharada de zumo de limón
aceite
400 gr de espinacas frescas
2-3 lonchas de bacon cortado en tiras finas (opcional)
200 gr de queso ricotta
1/4 cucharadita de orégano seco
1/2 cucharadita de sal
1 pizca de pimienta negra molida
1 pizca de nuez moscada
2 tomates cortados en rodajas
100 gr de mozzarella troceada
50 gr de queso parmesano
Preparación:
Limpiar los champiñones y cortarlos en láminas. Pelar el ajo y cortarlo en dados pequeños. Pelar los tomates y cortarlos en rodajas. Lavar y escurrir muy bien las espinacas. Cortar la mozzarella en trozos y reservar. Quitar la corteza al bacon y cortar en tiritas finas.
En una sartén calentar a fuego medio 1-2 cucharadas de aceite y saltear el ajo y los champiñones durante 5 minutos hasta que se doren y se ablanden. Retirar la sartén del fuego y añadir el zumo de limón. Remover y reservar.
En la misma sartén calentar 1 cucharada de aceite y freir el bacon para que suelte la grasa y se dore. Añadir las espinacas y saltearlas unos minutos hasta que se ablanden un poco o cocerlas al vapor en una cazuela grande con el agua que sueltan las hojas solo hasta que empiecen a arrugarse. Escurrir muy bien y picarlas.
En un bol grande mezclar las espinacas ya escurridas y picadas, el bacon, el ricotta, la sal y pimienta, el orégano y los champiñones. Remover bien.
Precalentar el horno a 175º.
Verter la mezcla de espinacas y champiñones en una fuente de horno engrasada. Colocar las rodajas de tomate encima de las espinacas. Cubrir las rodajas de tomate con el queso mozzarella troceado y espolvorear con el parmesano por encima.
Hornear a 175º durante 25-30 minutos o hasta que se dore.
Sacar del horno la fuente. Dejar templar un poco y servir enseguida.
Nota: Si se quiere un plato vegetariano suprimir el bacon.
ohhh me encanta!!! casi perfecta para mi régimen. Le quitaremos algo de queso, jajaja
ResponderEliminarSalu2. Paula
Buf!!! y Buf!!! adoro estos gratenes! Hoy para la cena había judía verde, la tenía muy a mano, he estado a punto de hacer espinacas, pero ya veo que el destino ha hecho que me espere a mañana!!! Me la llevo!!! Besote grande!
ResponderEliminarmmm, menuda pintaza con los champiñones..hoy he comidop algo parecido, pero me anoto tu propuesta. un beso
ResponderEliminarMmmmmmmmmmmmmmmm, tiene que estar delicioso. bss
ResponderEliminarComo bien dices un plato sabrosón y saludable, me ha gustado mucho. Saludos.
ResponderEliminarUauuuuuuuuuuuuuu, me has dejado impactada, no sólo porque la propuesta me parece deliciosa sino porque las fotos me parecen divinas, te felicito por todo.
ResponderEliminarun besazo, guapa y feliz día
Me encantan los gratenes con ese queso fundido que es la bomba. Besos!
ResponderEliminarAna
Te ha quedado un plato de lujo. Por aquí no hace tanto frío (hoy a medio día sobrepasamos los 21º) pero también se apetecen platos como éste así que tomo nota.
ResponderEliminarUn besito desde Las Palmas.
un graten sensacional y has elegido un par de ingredientes que casan divinamente¡¡
ResponderEliminarmuy bueno
beso
Ohhhhhh con lo que me gustan las espinacas este gratinado será preciso probarlo.
ResponderEliminarSaludos
Ooooooo.....este es mi plato ideal...mi hija me pide siempre espinacas....asi que aca tengo otra variacion!....Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarAaaay, cómo me gustan estos gratenes! échale queso (¡y bacon!) a cualquier plato y sube un montón de enteros :-D
ResponderEliminarLas espinacas y los champiñones casan muy bien, y los tomates son un añadido genial (además de color, dan jugosidad)
Comprado ;-)
Besotes
menuda delicia más impresionante! me encanta! sin duda pasa ya a mi lista de para hacer! un besazo,
ResponderEliminarNIEVES.
Si te digo que me encanta tu receta? Ya te lo puedes creer, una combinación deliciosa, que solo hay que ver las espectaculares fotos, para imaginármelo.
ResponderEliminarUn beso.
Wowwww... pero que pinta tan buena tiene este plato, por favor!! me encanta, aunque no sea de dieta ;)
ResponderEliminarUn abrazo
buaaaaa por dios qué bueno! para que después la gente se queje porque no sabe que hacer para comer! me encantan este tipo de platos, porque a parte de estar tremndamente ricos son muy versátiles, y un día se hacen con unos ingredientes y otro día con otros!
ResponderEliminarte ha quedado... bueno, que casi me ponía a lamer la pantalla! buenísimo! entra directamente por la vista!
un besito!
Laura
Ay, Alison, que aspecto más bueno le ha quedado a tu plato. Yo le quito el bacon y algo de queso y lo preparo un día de estos.
ResponderEliminarBesos
Cuando era pequeña no me gustaban ni los champis ni las espinacas y ahora los devoro. Hay que ver lo que me perdía hace años.
ResponderEliminartu receta es más que genial y bonita.
Besos.
me encanta esta receta!! la combinación de ingredientes es perfecta! :D
ResponderEliminarLo haré hoy a ver que tal, pero tiene una pinta estupenda
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